Durante los años noventa la revista Creepy, especializada en el cómic de terror, publica "El otro Necronomicón", de los valencianos Jaime Brocal Remohí y Antonio Segura, una serie de historietas basada en la obra del célebre escritor estadounidense H.P. Lovecraft; la colección sería recopilada en un tomo único publicado en 1992, que contaría con prólogo del dibujante argentino, de origen uruguayo, Alberto Breccia.

Según se cuenta en el prólogo, las distintas historietas estarían inspiradas en un manuscrito propiedad de H.P. Lovecraft, que Breccia bautiza como el "Otro Necronomicón", en referencia al libro ficticio que mencionara Lovecraft en más de una ocasión como fuente de sus escritos; las verdades ocultas en el "Otro Necronomicón" serían tan oscuras, que ni siquiera Lovecraft se había atrevido a publicarlas.

El lapiz de Brocal plasma con acierto la atmósfera opresiva de cada una de las historias, ilustrando a la perfección los aterradores guiones de Segura; cabe destacar el capítulo "Shoggoths", que nos presenta a H.P. Lovecraft como investigador de lo paranormal, y "Jugando con fuego", en el que los propios Brocal y Segura quedan encerrados en un panteón del cementerio municipal de Valencia, donde son testigos de una alucinación excesivamente real.