En 1982 surge en la ciudad de Valencia uno de los mejores grupos valencianos de la década de los ochenta, Última Emoción, una banda que se caracterizaba por la personalidad y el encanto que sabían transmitir a sus canciones. Nacidos originalmente con el nombre de Europa, el grupo estaba formado por Alfonso Aguado, cantante; Lino Oviaño, guitarra y caja de ritmos; y Julio Pastor y José Luis Macias, a los teclados; en esta misma época, Macías también colaboraba con, Glamour, otro de los grupos míticos de la época.

Un año después de su creación, el grupo graba su primera maqueta "La última emoción", que tras pasar por las manos de diversos productores, les abre las puertas del sello MR. Ese mismo año publican, ya bajo el nombre de Última Emoción, el mini-LP "Dos minutos de odio" (1983), grabado en un solo día en los Estudios Audiofilm de Madrid, con la colaboración del guitarrista de Ceremonia, José Godofredo; el disco incluía seis piezas techno-pop con estribillos muy pegadizos, entre las que destaca "El misterio de los tomates eléctricos", dedicada al carismático grupo valenciano Tomates Eléctricos.

Durante 1983 ofrecen numerosos conciertos por toda la comunidad española, de la mano de su manager, Vicente Mañó, y publican el tema "Las reglas del juego" en uno de los recopilatorios publicados por MR. Tras romper con esta discográfica, publican la casette "Máquinas románticas" con D.A.I. (División Avanzada Independiente), que sería distribuida principalmente por la ciudad de Valencia.


Poco a poco, los miembros del grupo irían distanciándose durante 1984: Aguado decidía centrarse en Los Inhumanos, grupo que ya había publicado su primer single; Macías empezaba a preparar junto a Carlos Goñi el nacimiento de Comité Cisne, a los que se uniría poco después Lino Oviaño; y Julio Pastor crearía, años después, el sonido Megabeat, que daría lugar al mundialmente famoso Sonido de Valencia.